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El Curiosity Rover es un juguetico altamente tecnológico y polifacético y admirable que va a rodar por el planeta Marte este lunes 6 de agosto del año del Señor Que Como Cualquier Falsificador Nadie Sabe Su Nombre Verdadero del 2012, a eso de las 5:31 UTC; o su traducción al español simple: Tiempo Universal Coordinado; o su traducción al inglés todavía más simple: You Google That Shit. Bueno, si es en la mañanita o en la tarde uno va a poder detenerse en su ruta al trabajo o a la casa a disfrutar de las primeras imágenes de Marte, en vivo con apenas 14 minutos de retraso, en alguna de las pantallas gigantes que parecen reproducirse como conejos transformers en Times Square.

Un gran momento para la ciencia ya que Curiosity, como le decimos de cariño en la NASA mental, anda cargado y preparado con tubos y jeringuillas para analizar in situ cualquier cosa rara o familiar como una ameba o el vestigio de una plaga en algún sedimento marciano; o algo más sorprente quién sabe, alguna jeroglífica rúbrica artística incrustada en metal alienígeno y que al decodificarse al inglés diga más o menos, "Made by God", y al lado otra más pequeña y más artesanal que diga "& destroyed by Him also too no yes run run run".

Curiosity está programado para no perder su tiempo tratando de hacer contacto con un primo tercero llamado Oportunity que marterizó en el hermano planeta en el 2004, y cuya última transmisión recibida hizo que recordáramos el Marvin de Adams: "I'm bored, and I'm very depressed". 

Otra tareíta de Curiosity será estudiar la habitabilidad en Marte, o su traducción al fatalismo: 'Ver Si Se Puede "Vivir" En Ese Hoyo'; además enviará coordenadas de ruta y tips útiles para los viajeros siderales de la muy prontamente necesaria misión comandada por monos y hombres y mujeres y niños y perros y gatos y periquitos. Esta es la parte importante para sus bisnietos y tataranietos suyos de ustedes (yo, esta risa no es de gozo, soy estéril); los científicos han comprendido desde hace añales que esta destrucción ambiental y fetichista no la pa ra na die, más temprano que tarde habrá que decir adiós y gracias por todas las tilapias a esta no hace mucho bella silvana maternal Tierra, a la que los supermercados, a la vista de todos nosotros, están matando con funditas de plástico.